El sensor de calidad del agua es un dispositivo diseñado para detectar y medir diversos parámetros del agua. Puede controlar factores como el valor del pH, el oxígeno disuelto, la turbidez, la conductividad y la concentración de iones o contaminantes específicos. Estos sensores juegan un papel crucial en diferentes campos. En el seguimiento ambiental, ayudan a evaluar la salud de ríos, lagos y océanos. En los procesos industriales, garantizan la calidad del agua utilizada en la fabricación para evitar daños a los equipos y defectos del producto. Con tecnología avanzada, los sensores de calidad del agua proporcionan datos precisos y en tiempo real, lo que permite tomar medidas inmediatas para mantener o mejorar la calidad del agua para actividades tanto ecológicas como humanas.